Barrio de Schamann

El origen del nombre de este barrio de Las Palmas de Gran Canaria se remonta a Suiza, cuando, en el último tercio del siglo XIX, un comerciante viudo con varios hijos llegó a la isla. En 1912, uno de sus hijos, Alfredo Schamann, adquirió una gran extensión de terreno en la zona alta de la ciudad, un lugar aislado y lejano de lo que en ese momento era el núcleo urbano de Las Palmas, lo que podría describirse como un amplio descampado.

El 26 de junio de 1928, Alfredo Schamann solicitó la parcelación y posterior urbanización de estos terrenos en el desaparecido Ayuntamiento de San Lorenzo, un área ubicada en la meseta alta de Las Rehoyas. A partir de ahí, comenzó la urbanización, en la que Schamann, junto a otros socios minoritarios, se dedicó a la venta de solares para la autoconstrucción de viviendas. Él mismo era el encargado de llevar a los posibles compradores al lugar, en guagua, y de formalizar las ventas, que se realizaban a través de pequeños pagos mensuales en su ferretería, La Llave, situada en Triana. Fue en los años 1920-1930 cuando se dio este primer impulso al desarrollo del barrio.

Sin embargo, la Guerra Civil Española y la Segunda Guerra Mundial interrumpieron el proceso, lo que ralentizó la construcción. No fue sino hasta más adelante cuando se reactivó la autoconstrucción, aunque de forma limitada, y las viviendas eran modestas, con pequeños patios donde se cultivaban hortalizas y se criaban animales como cabras y gallinas.

A medida que la economía de la isla comenzó a mejorar, también lo hizo la demanda de viviendas. A finales de la década de 1940, la familia Schamann ofreció los terrenos al Ayuntamiento, lo que marcó el inicio del verdadero proceso de consolidación del barrio. En 1944 se construyeron las primeras 56 viviendas unifamiliares, que se entregaron bajo el nombre de Generalísimo Franco.

El plan de promoción pública de viviendas continuó con la construcción de 60 viviendas más en 1949, en un tiempo récord de seis meses. Estas viviendas eran de tamaño reducido y estaban destinadas a familias numerosas que vivían en condiciones precarias, en cuevas o lugares insalubres.

A lo largo de las décadas siguientes, el barrio siguió creciendo, con la edificación de bloques de viviendas de hasta cuatro plantas. En la actualidad, Schamann es un barrio de clase media, con edificaciones de mejor calidad que las originales y una infraestructura completamente desarrollada, con todos los servicios propios de una zona urbana. También se construyó una iglesia de arquitectura moderna.

En definitiva, Schamann es un barrio típico de las ciudades que comenzaron a experimentar un rápido crecimiento y desarrollo durante la segunda mitad del siglo XX. Hoy es un reflejo del progreso urbanístico y social de Las Palmas de Gran Canaria.